La Colección de Oleicultura y Labranza de Eulogio Calleja Grajera estrena “casa”. La segunda sala de exposiciones permanentes de la Colección Museográfica Villa de Mengíbar, ubicada en el Edificio de Usos Múltiples, abrió ayer sus puertas ante la presencia de numerosos vecinos, representantes del Ayuntamiento y de los colectivos culturales locales, así como familiares y amigos del protagonista. Él, Eulogio Calleja, no disimulaba su emoción por la reapertura de su muestra permanente de cuidadas miniaturas y recreaciones de piezas únicas y maravillosas que muestran al visitante cómo se ha ido haciendo aceite de oliva a lo largo de la historia.
Diversos factores han motivado el cambio, y son prácticamente similares a los que se tuvieron en cuenta en su tiempo con el traslado de la sala de la Acción de Mengíbar a este lugar, ya que la colección Allendesalazar pasó de la planta baja de la Torre del Homenaje hasta el Edificio de Usos Múltiples.
“Hoy, la Colección Museográfica de nuestra villa se enriquece enormemente con esta reinauguración, que es un nuevo paso más para ir concentrando los tesoros que tenemos en nuestra ciudad para ser vistos, contemplados y disfrutados por los vecinos y por los visitantes”, expresó el alcalde de Mengíbar, Juan Bravo Sosa.
El máximo responsable municipal añadió que la unificación de los espacios expositivos permanentes en un mismo lugar servirá para “fomentar la cultura y el turismo, con más disponibilidad horaria y con más facilidades para quienes quieran conocer nuestro patrimonio local”.
La presentación del acto corrió a cargo de Emilio Plazas, comisario de la exposición y una de las personas que mejor conocen la grandiosidad de las miniaturas. “Con una escala muy precisa auténticas maravillas, como puede ser la colección de los arados, las trillas o los carros de transporte. De éstos, ha contado Eulogio que en muchas ocasiones intentaron comprárselos con un cheque en blanco, pero él decía que no estaban en venta, que los querían conservar. La verdad es que son una auténtica joya”, aseveró Plazas.
Igualmente, el arqueólogo mengibareño recordó que muchas de las piezas sirven para mostrar a las nuevas generaciones artefactos que ya se han perdido. Durante la jornada, también se exhibió un vídeo documental y Emilio Plazas realizó una visita guiada por la nueva sala, donde desgranó detalles desconocidos de unas piezas que vuelven a ser expuestas para emocionar a quien las contempla.
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