El Ayuntamiento de Mengíbar ha adquirido el emblemático edificio de la Casa Palacio. Así lo ha informado el alcalde, Juan Bravo Sosa, quien ha indicado que la operación se ha realizado como inversión municipal para evitar el deterioro de la céntrica infraestructura (cuya titularidad de encontraba en concurso de acreedores) y poder revitalizarla para generar, así, riqueza para el municipio.
El máximo responsable municipal ha detallado que la compra ha costado 2,8 millones de euros. “Una cantidad perfectamente asumible para este Ayuntamiento, dada la buena situación económico-financiera de las arcas municipales”, ha manifestado Bravo Sosa.
“Por primera vez en la larga y rica historia de este representativo edificio, la Casa Palacio será de los vecinos de Mengíbar, y la adquisición de la Casa Palacio servirá para que el inmueble se ponga en valor desde las perspectivas históricas, culturales, turísticas y de generación de riqueza para el municipio”, ya que, según ha añadido Juan Bravo Sosa, su recuperación se traducirá en nuevos puestos de trabajo.
Tras conseguir la titularidad municipal, el Ayuntamiento pretende que la Casa Palacio acoja en una parte del edificio el futuro Centro de Interpretación de Iliturgi. Al mismo tiempo, se estudiarán las opciones de licitación de explotación del espacio a través de acuerdos que reflejen posibilidades de uso de zonas comunes por parte del Ayuntamiento de Mengíbar para celebrar actos públicos de interés para la ciudadanía.
Un edificio histórico
“El equipo de Gobierno de Mengíbar entiende que se ha dado una situación propicia para que, por primera vez en ocho siglos de historia, este importante edificio sea de los vecinos mengibareños, con todo lo que ello significa patrimonial, histórica y sentimentalmente”, ha afirmado el alcalde.
La Casa Palacio se encuentra ubicada en la zona central del conjunto Histórico-Artístico, junto a la Torre del Homenaje (ss. XIII-XIV), la iglesia parroquial de San Pedro Apóstol (ss. XIII-XVI), y el Ayuntamiento de Mengíbar. La entrada principal del inmueble da a la Plaza de la Constitución, mientras que el resto de la fachada da a la Calle Real, arteria principal de Mengíbar.
Desde el cierre del Hotel Palacio, y en situación de concurso de acreedores hasta ahora, el inmueble ha sufrido deterioro patrimonial, así como diversos robos en el interior de las instalaciones. Estos han provocado que la entrada al público por la calle Real fuese tapiada y que durante meses haya habido vigilantes de seguridad en el recinto para evitar nuevas sustracciones.
